El Funetcincences en el hecho demuestra su ligazón con las luchas del pueblo, y no estamos ajenos a ello, somos un gran número de trabajadores despedidos de la década del noventa que venimos desplegando una grandiosa lucha contra el Estado peruano y aquellos que colaboran con él, pasando de luchas aisladas a luchas conjuntas. En cuanto a movilización que salimos levantamos nuestra consigna: ¡¡inmediata aprobación de una Quinta Lista para los trabajadores despedidos de parte del Estado peruano
Las luchas
del pueblo hacen posible que se vengan abajo planes reaccionarios contrarios al
pueblo, ese es el camino que nos ha legado nuestro querido pueblo, considerando
a la lucha como lo absoluto, no hay otro modo de resolver los embates del Estado que sirviendo a
intereses neoliberales de las empresas transnacionales y monopólicas incluidas
algunas nacionales, osan levantar la mano al estudiantado, al obrero, al
campesinado, al intelectual.
En esta ocasión
la juventud secundado por todos los sectores de nuestro pueblo han expresado su
repudio total a una ley de sobre explotación juvenil promovida por la confiep,
adex y los partidos de la derecha; hicieron
posible su derogación que en la práctica es una Ley nula porque ha nacido muerta
y su camino es ser expulsada del ordenamiento jurídico bajo sanción de nulidad
absoluta, así se tiene que concebir.
Ahora queda
un largo caminar sobre otras leyes de reforma que también han sido impuestas
para barrer derechos de los trabajadores y del pueblo peruano, en razón que
todas estas leyes de reforma apuntan a resolver problemas económicos de la gran
burguesía, y no ha solucionar los problemas álgidos de nuestro pueblo. Han sacado
leyes para reducir el aparato estatal, reducir la planilla, privatizar y
expulsar de los centros de trabajos a miles y miles de trabajadores públicos, cambiándoles
previamente con las leyes de reforma su régimen
laboral de estabilidad, por otro régimen laboral flexible, y partir e allí estando en el campo de la flexibilidad
promover coacción evaluación racionalización y demás mecanismos ilegales con el objeto de
despedir masivamente, como en la década de los noventa.
Esas leyes
ilegales son las leyes de Reforma Magisterial, De Servicio Civil, de Reorganización
Del Sector Salud, del Poder Judicial, de las universidades peruanas, de las
fuerzas policiales de Sunarp, Banca Nacional y sigue la lista para enumerarse.
Entonces, se viene duros momentos para la clase trabajadora porque están como
espada de Democles en el cuello de todos los trabajadores esta leyes de
reforma, ante lo cual corresponde asumir ciertamente la Nulidad por ser
inconstitucionales.
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